lunes, 27 de octubre de 2014

LAS POLIS GRIEGAS Y EL PROCESO DE EXPANSIÓN Y COLONIZACIÓN

La polis era una comunidad jurídicamente autónoma y soberana de carácter agrario, dotada de un lugar central que actúa como núcleo, político, social, administrativo y religioso. Sus origenes se encuentra en la ciudad de Esmirna, en el 850 a. C. y rápidamente se difunde por el Egeo. 



Estaba formada por el asty (núcleo central amurallado dotado de cierto grado de urbanismo en el que se encuentra la plaza pública, el ágora y la acrópolis, los templos urbanos) y la chora (el territorio dependiente articulado administrativamente a través de santuarios periféricos).

La polis como centro de acumulación de poder y de excedente, debe su formación a la aristocracia, que desde sus inicios controlará de forma absoluta todos los mecanismos políticos, sociales, legales y religiosos de las ciudades- estado. Esta situación inicial y la progresiva saturación de los pobres territorios griegos fruto del crecimiento demográfico agudizarán las diferencias sociales generando un conflicto social casi endémico, la stasis -que justamente da lugar al nacimiento de las poleis.  La ciudad, entonces, es efecto y causa de esta conflictividad interna, que afecta a los diferentes segmentos de una sociedad configurada como comunidad política. Las raíces de la stasis se hallan en los problemas de la tierra, que prontamente va a expulsar gente hacia el Egeo. 
Algunos elementos socioculturales dan algo de coherencia a los pueblos helénicos: la lengua común, el oráculo de Delfos, los juegos olímpicos y con el tiempo, un enemigo común, los persas. 


sábado, 25 de octubre de 2014

LA CIVILIZACIÓN MINOICA Y MICÉNICA

En Creta, el más conocido el de la ciudad de Cnossos (2000/1500 a. C.) se desarrolla la denominada "Talasocracia" -es decir el control pacífico de las redes comerciales del Mar Mediterráneo oriental- alrededor de las entidades protoestatales o ciudades-palacios

                                     
Estas actúan como núcleos de almacenamiento de excedentes de producción (hecho que aparece mencionado en los registros de la escritura Lineal A), centro político y social del mundo minoico. 
Tras la caída de los palacios cretenses y, con ella, la talasocracia, el auge de las aristocracia bélicas (los aqueos, poblaciones de origen centroeuropeo que habían llegado  a Grecia en la primera mitad del II milenio a. C) da lugar a la aparición de nuevas entidades protoestatales identificadas como ciudades-fortalezas micénicas (1500/1200 a. C.)



Las fortalezas micénicas actúan como nuevos centros económicos (administración de excedentes de producción y otro medio de registro como fue la escritura lineal B) y políticos de carácter aristocráticos, cuyos jefes locales se hacen enterrar en los Toloi (tumbas cámara). Las ciudades-fortalezas entran en crisis en torno al año 1200 a. C., debido a un conjunto de causas, como las luchas entre sociedades micénicas, conflictos sociales, crisis de saturación del territorio o variaciones climáticas. Estas transformaciones parecen afectar al conjunto del ámbito Egeo y se ven acentuadas por movimientos migratorios, identificados como invasiones dorios aunque se deben relacionar con un proceso más amplio, los movimientos de los "Pueblos del Mar", que afectará a todo el Mediterráneo oriental. Con la caída del mundo micénico, nace la denominada "Época Oscura" (1200/800 a. C.) que da un final a las estructuras protoestatales anteriores y da comienzo una dispersión poblacional, ruralización y empobrecimiento de Grecia. Destaca la aparición de importantes novedades sociales. territoriales (diferencias interregionales) y materiales como el uso del hierro, la difusión de la incineración y las tumbas individuales y las decoraciones cerámicas geométricas. El empobrecimiento provoca un proceso inmigratorio desde la Grecia continental a las regiones costeras de Anatolia, conocida con el nombre de "Primera Colonización Griega" (1140/1050 a. C.) que creará nucleos de población griega (apoikías), germen de las futuras ligas. 


¿QUIENES ERAN LOS GRIEGOS?

El pueblo de habla griega, emigrando hacia el sur durante el año 2000 a. C. entró en la península griega. A partir de entonces, contribuyeron a configurar la civilización del periodo de la edad de la Bronce que suele denominarse Micénico (1400/1200 a. c. )y que tuvo sus centros principales en el Peloponeso (la parte sur de la Grecia continental) en sitios como Micenas, Argos y Pilos. 


Alrededor del 1200, la civilización micénica tuvo un final muy brusco, atribuido por la mayoría de los historiadores a una nueva inmigración griega: la de los dorios. Los 400 años siguientes fueron una Edad Oscura por lo poco que se sabe. Durante ella, desapareció el arte de la escritura, cayeron los grandes centros de poder, eran común las guerras; y otros grupos menores emigraron al interior de Grecia y de Asia del Este. Todas las cosas, tanto en el nivel de lo material como en cultural eran muy pobres si se los compara con los de la civilización micénica. Fue durante aquella edad Oscura cuando ocurrió una  importante revolución técnica (el uso del hierro) y nació la sociedad griega. El viejo mundo micénico tenía estrechos vínculos de parentesco con los estados fuertemente centralizados y burocráticos que ocupaban las regiones hacia el Este, el norte de Siria y la Mesopotamia. 
Los griegos nunca se llamaron a sí mismos "griegos"; esta denominación proviene del término en que los romanos los designaron. En la época micénica parece que eran conocidos con el nombre de aqueos, uno de los varios nombres que se los da en los poemas homéricos. 
Durante el transcurso de la Edad Oscura, el término Helenos reemplazó a todos los demás y Hélade pasó a ser el nombre colectio que se aplicaba al conjunto de los griegos.  Para ellos la Hélade era una abstracción pues los griegos antiguos nunca estuvieron unidos política y territorialmente.  


La civilización griega floreció y se desarrolló al borde del mar y no tierra adentro. La Hélade se extendió hacia el este, el litoral del Mar Negro, las zonas costeras del Asia Menor y las islas del Mar Egeo, la Grecia continental en el centro, y hacia el oeste, la Italia del sur y la mayor parte de Sicilia continuándose luego por las riberas del Mediterráneo hasta Cirene, en Libia, y hasta Marsella y algunas localidades costeras de España. Todo se consideraba periférico: terrenos de donde sacar los alimentos, metales y esclavos, regiones por recorrer en busca de botín o aptas para colocar las manufacturas griegas pero no para ser habitadas por griegos. 
Todos aquellos griegos tenían conciencia de pertenecer a una cultura común

La formación del estado primitivo griego

La evolución de las sociedades simples (diferencias internas de carácter primario como el sexo y la edad) a las sociedades complejas (diferencias sociales de rango debido a la aparición de comunidades históricas), se observa a partir de la centralización de las funciones y servicios comunitarios en un núcleo, generando de esta forma las primitivas entidades estatales. Así, aparecen durante este periodo la escritura, las primitivas instituciones de gobierno, las religiones y la estructura social. En Grecia nacen las entidades protoestatales durante el 2do milenio antes de Cristo, en el ámbito del Mar Egeo, aunque será durante los siglos IX y VIII a. C (800/700) cuando aparecerá la entidad estatal griega característica: la polis.



domingo, 28 de septiembre de 2014

ARTE MONUMENTAL Y RELIGIÓN EN EGIPTO

El arte egipcio está relacionado con la importancia que tenían el faraón y la religión dentro de la sociedad. La búsqueda de la vida eterna es el motivo fundamental de casi todo el proceso de creatividad de Egipto.  
Sus características generales son la religiosidad, la majestuosidad, el tradicionalismo y la monumentalidad.
La monumentalidad es el rasgo fundamental de la arquitectura egipcia. Un ejemplo de ello son las pirámides, edificadas como parte del complejo funerario de los faraones. Las más destacadas son las Pirámides de Gizeh, dedicadas a los faraones Keops, Kefrén y Micerino.

En un primer momento, las tumbas de los reyes eran simples fosas para luego construirse las mastabas o construcciones de base rectangular y paredes inclinadas.                                                                                                                                             Como etapa intermedia en la construcción de tumbas funerarias se observan las pirámides escalonadas. Por último se construyeron las pirámides más conocidas, que comprendían la tumba con el sarcófago, un templo y una cámara funeraria falsa, realizada para confundir a los saqueadores (sobre todo por los frecuentes robos durante los periodos intermedios). Durante el Imperio Nuevo, los faraones mandaron a construir nuevas tumbas llamadas "hipogeos", lugares subterráneos cavados generalmente en una roca.

Las Pirámides de Keops, Kefrén y Micerino

Hipogeo del Valle de los Reyes
La escultura egipcia presenta también obras de gran monumentalidad como la Esfinge de Gizeh, la estatua de Ramsés II. La pintura constituía un importante elemento decorativo: se encontraba incluso en las tumbas. Sus temas eran variados; desde fiestas, ceremonias y escenas de la vida cotidiana. Los pintores no utilizaban la perspectiva, pues las figuras humanas siempre se representaban de la misma forma, con la cabeza y las piernas de perfil, con un ojo de frente -al igual que el torso- mirando al espectador.




Religión Egipcia
La religión ocupó un espacio importante en la vida del pueblo. En un principio, las aldeas egipcias se relacionaban con un totemismo primitivo (es decir, con una divinidad protectora del clan, que podía ser un animal sagrado que los protegía y gobernaba) hasta cuando sus creencias se enfocaron hacia un politeísmo sagrado (basado en la creencia en varias divinidades).
La forma de representación de estos dioses variaba: era frecuente representarlos como mezclas entre hombre y animal (antropozoomorfismo) como por ejemplo, con cabeza de animal y cuerpo de hombre, o directamente con forma humana (antropomorfismo). Como dijimos anteriormente, el único momento en que aparece una tendencia monoteísta es durante el reinado de Amenhotep IV, en el Imperio Nuevo, cuando este rey pretendió imponer el culto de Atón, auqnue no sobrevivió luego de la muerte de su fundador.
Los dioses más importantes fueron:

  • HORUS: dios halcón, gran dios de los espacios vacíos y del cielo. Se lo representaba con cabeza de ave y cuerpo humano. También se lo consideraba el dios naciente. 
  • ISIS: la luna. Era esposa de Osiris y madre de Horus. Se la representaba como una mujer que llevaba en su cabeza cuernos sobre un disco solar o asiento.
  • THOT: era considerado el dios de la palabra, la verdad y la sabiduría. Con frecuencia se lo representaba como un hombre con cabeza de ave, que defendía al muerto en el juicio final.
  • OSIRIS: dios del Más Allá. Tenía figura humana y presidía el juicio de los muertos. Llevaba un látigo para castigar y un gancho para detener. También se lo consideraba el sol poniente, el dios de la vegetación y los desvalidos. Gozaba de mayor popularidad dentro del panteón.
  • ANUBIS: dios de los muertos y señor de los embalsamadores. Era representado con figura humana y cabeza de chacal. Se encargaba de controlar la balanza de pecados durante el Juicio Final de los Muertos.
  • AMÓN: dios de Tebas, el dios misterioso. Dios de la luz y el aire, también se creía que beneficiaba la fecundidad.

El culto de los muertos 

Los egipcios creían que existía otra vida después de la muerte, y sólo se sería feliz o no según la conducta que la persona hubiese tenido mientras vivía. 


Para ellos, el alma era sometida a un juicio ante un tribunal de 42 dioses, presidido por Osiris, y el dios Thot como escriba. El alma era colocada en el platillo de una balanza mientras que en el otro lado se colocaba una pluma. Un alma tanto o más liviano que este merecía la vida eterna junto a los dioses, pero si era más pesada, un ser monstruoso -que la esperaba junto a la balanza- la devoraba.


Para que el alma pudiera asistir al juicio, el cuerpo del difunto debía ser conservado por medio del embalsamamiento, y luego colocado en una tumba con las pertenencias que, se supone, iba a utilizar en la otra vida. 




sábado, 13 de septiembre de 2014

EGIPTO, EL PAÍS DEL NILO

Para hablar de Egipto primeramente debemos ubicarlo geográficamente.Se encuentra en la parte oriental de África del Norte. Actualmente, es conocido con el nombre de República Árabe de Egipto y cuenta con una población de más de 45 millones de habitantes. Si observamos la ubicación de Egipto y el territorio que lo rodea, podremos ver una serie de barreras naturales que podrían haber sido beneficioso para la civilización. Al este, se encuentra rodeado por el desierto de Arabia, al oeste el desierto de Libia, al norte el Mar Mediterráneo. Al sur, el valle del Nilo formaba una "garganta" estrecha que los egipcios controlaban fácilmente. De esta manera, eran pocos los que se aventuraban a transitar por estos lugares desiertos, y se puede decir que los egipcios se encontraban en un lugar estratégico. 
La civilización egipcia se extendió a lo largo del curso inferior del Río Nilo, donde se instalaron los primeros poblados.

    

A lo largo de su historia, Egipto alternó entre periodos de esplendor -en los que se formaban reinos y se extendía el imperio- y de decadencia -más conocidos con el nombre de periodos intermedios, donde invasiones externas y luchas civiles hacían peligrar la civilización. 


El éxito de la civilización egipcia tuvo relación con el manejo y su capacidad para adaptarse a los condicionamientos del río Nilo. La agricultura fue la base de la economía del Egipto antiguo, y en ella tuvieron mucho que ver las crecidas e inundaciones de su cauce. La necesidad de coordinar la irrigación de los campos de cultivo llevó a los habitantes de los primeros poblados agrícolas a iniciar un proceso de integración territorial. En primera instancia, en unidades denominadas "nomos", y en última instancia, en los reinos del Norte (con capital en Buto) y del Sur (con capital en Hieracómpolis). En los albores del año 3100 a. c., el faraón Narmer (o Menes) lleva adelante una política expansiva, que desemboca en la subordinación del Bajo Egipto y la unificación de los dos reinos. Este acontecimiento se expresa en la Paleta de Narmer, fechada en el periodo Predinástico (entre el año 3500 y 3100 a. c.)


Paleta de Narmer, encontrada en Hieracómpolis, antigua capital del Alto Egipto.

El Río Nilo
Los egipcios llamaban a su país "País de la tierra negra", que hacía mención a las márgenes del Nilo que cada veranos, cuando crecía el caudal del río e inundaba el valle, queda cubierta por limo negro, una especie de barro fertilizante. Este río nace de una serie de lagos y arroyos de África oriental y es alimentado anualmente por el deshielo de las montañas de Etiopía.En total recorre cerca de 6500 Km. El valle se encuentra en el Alto Egipto mientras que el delta es el Bajo Egipto
La inundación previsible, incluso a partir del uso de nilómetros, y el riego controlado del valle fértil- utilizando el conocido shaduf- con cultivos que ofrecían excedentes de productos permitió el desarrollo social y cultural de esta civilización.




La unificación del Alto y Bajo Egipto

Durante el Periodo Arcaico (3100/ 2800 a. c.) se produce la unificación del Alto y Bajo Egipto. Quien tuvo el poder de llevar a cabo este proceso fue el faraón Narmer (o Menes), que inicia la Dinastía I egipcia. Es en este momento cuando un solo monarca llevará la doble corona, que significaría los reinos definitivamente unidos en uno sólo.
Existen entre los historiadores diferentes ideas sobre la unificación de ambos reinos. Por un lado se estima que no se produjo ningún proceso violento como una guerra, sino más bien que las necesidades comerciales llevaron a una progresiva unión entre ambas regiones. Hay que tener en cuenta que Egipto comerciaba con la Península del Sinaí, con el Líbano, Siria y Nubia y establecer una ruta comercial segura podría ser uno de los objetivos de la unificación. Esta teoría no coincide con lo que se observa en la conocida Paleta de Narmer, perteneciente al periodo Arcaico, fuente que refleja el dominio militar del Alto Egipto sobre la región del Delta.
La simbología en Egipto era muy importante. Si analizamos la Paleta de Narmer, podemos definir los personajes del periodo y la representación del dominio de un pueblo sobre otro. El rey Narmer matando al enemigo con el cetro, el halcón (figura típica del Alto Egipto) ahorcando y casi devorando una serpiente (identificada con el Bajo Egipto), los dos animales sobrenaturales entrelazando sus cuellos cómo símbolo de la unificación y la aparición de enemigos muertos frente a un faraón ciñendo las dos coronas (la blanca del Alto y la roja del Bajo respectivamente) son algunas de las explicaciones que nos ofrece esta fuente antigua. 

Paleta de Narmer

El faraón: dios y señor del Alto y Bajo Egipto

El nombre egipcio equivale a la palabra "casa grande". El poder de este residía en que era hereditario por lo que generalmente lo sucedía un hijo. Los faraones egipcios se casaban con mujeres de su misma familia o de familias más poderosas. De esta forma surgieron las dinastías que reinarán cerca de 3000 años. 
El faraón era el responsable de distribuir el agua y el excedente de la producción, de administrar justicia, además de desempeñarse como jefe militar y sumo sacerdote. Junto a él se encontraba un conjunto de funcionarios encargados de tareas administrativas como la recolección del tributo.
El territorio egipcio estaba dividido en "nomos" o provincias, administradas por nomarcas o gobernadores que debían obediencia al faraón salvo cuando mediante rebeliones o luchas civiles-como las que ocurrieron durante los periodos intermedios- decidían tomar el control de sus propias regiones.



Periodos Históricos

Como se dijo anteriormente, la historia egipcia se puede dividir en diferentes periodos para su mejor estudio.
Reino Antiguo (2800 a 2200 a. c.): con capital en Menfis (ubicada en la mitad de ambos reinos, el Alto y Bajo Egipto), durante este tiempo el tamaño y la riqueza de las construcciones hacen pensar en una época de prosperidad. Los faraones erigen las primeras pirámides, hecho que demuestra su virtual alejamiento de la vida terrenal.
Primer Periodo Intermedio (2250 a 2025 a. c. ): una época de crisis del estado faraónico, con invasión de poblaciones extranjeras y gobiernos paralelos en el Alto y Bajo Egipto, bajo la jefatura de nomarcas. La decadencia de este periodo se manifiesta en la pérdida del comercio con el exterior y en las construcciones funerarias.
Reino Medio (2025 a 1780 a. c.): hay un nuevo proceso de centralización del poder del Estado en la figura del faraón, aunque aparece  mucho más humanizado y cercano a su población. Por ejemplo, en lo que respecta a la justicia y las relaciones familiares. 
Segundo Periodo Intermedio (1780 a 1730 a. c.): fue cuando llegaron nuevos pueblos nómades, los hicsos que ocuparon el delta del Nilo. Finalmente fueron expulsados por los egipcios, que a partir de ese momento iniciaron una política expansiva, adueñándose los territorios de Siria, Palestina y Nubia. 
Imperio Nuevo (1730 a 1085 a. c.): producto de la política de conquistas, fue una época donde se desarrollaron intensas relaciones comerciales con el Cercano Oriente y los territorios conquistados. Las construcciones funerarias y templos se ampliaron y enriquecieron, hecho que se observa en la construcción del Valle de los Reyes.
Tercer Periodo Intermedio (1085 a 712 a. c.): se produce por la invasión de los pueblos hititas. Pronto derivara en la conformación de gobiernos locales cuyo poder estaba en manos de sumos sacerdotes y faraones libios. 
Época Tardía (712 a 331 a. c.): el territorio egipcio fue invadido por ejércitos nubios, asirios y persas para finalmente formar parte del imperio romano.



El Gobierno egipcio
El Estado egipcio se distinguió de otros estado de su época por el carácter divino de la realeza. Cómo se dijo anteriormente, el faraón era un Rey-Dios, cabeza de todo el sistema económico, político y social. Un caso paradigmático es el del faraón Amenhotep IV, que se hizo llamar posteriormente como Akhenatón (1350/1333 a. C.) producto de la imposición del culto único al dios solar Atón, durante los 17 años en que duró su reinado. El faraón fundó la ciudad de Akhetatón (hoy Tell el- Amarma) y su corte abandonó la capital tradicional del dios Amón, ubicada en la ciudad de Tebas. Su esposa fue Nefertiti, de quien se conserva una cabeza esculpida de yeso, expuesta en Francia.


La sola presencia del faraón aseguraba para la población el orden, la justicia y la prosperidad. Garante de las inundaciones anuales del Nilo, se lo identificaba con el dios Horus (el halcón), y después de su muerte, con Osiris (el dios de los muertos y la resurrección). 
Si bien su poder era despótico y absoluto, el faraón contaba con colaboradores para el ejercicio de su poder. Por ejemplo, el visir supervisaba los trabajos hidráulicos, las tareas agrícolas que cumplía un sector de la población y el comercio. Asimismo, debía hacerse cargo de las demandas sociales por lo que gestionaban cierto grado de justicia. 
Los nomarcas se encargaban de gobernar las provincias donde se agruparon las aldeas. Elegidos por el faraón, también se ocupaban de inspeccionar los canales y del cobro de impuestos (sobre todo en los breves periodos intermedios).
Los sacerdotes se dedicaban al culto de los dioses (hay que recordar que la egipcia era una religión politeísta) y a las ceremonias funerarias. También eran nombrados por el faraón y sus cargos eran heredables.
Por último, los escribas eran funcionarios muy importantes para la realeza; leían y escribían los documentos oficiales y se creía que era una casta de élite, ya que se educaban en escuelas especiales.
                                                 

En la base de la pirámide egipcia se encontraban los campesinos, productores de alimentos. Si bien eran hombres libres, debían trabajar parcelas asignadas por el Estado y las tierras pertenecientes directamente al faraón, los sacerdotes y los templos. También ayudaban a la construcción de obras públicas y la refacción de canales, diques e incluso tumbas. 
Por último se hallaban los esclavos, que eran extranjeros obtenidos de las guerras como prisioneros o mediante la compra directa. 

Economía y cultura

La economía egipcia estaba basada en la agricultura. El cultivo de la tierra dependía del río Nilo, que con sus crecidas irrigaba y fertilizaba el suelo. El Estado regulaba la irrigación a través de la construcción de obras públicas y controlaba el nivel de la inundación -a través del uso de nilómetros- para tomar las medidas necesarias en el caso de muy bajas o altas crecidas del cauce. La organización económica era tributaria, es decir que los súbditos estaban obligados a entregarle al estado una contribución, el tributo, ya que las tierras eran propiedad del monarca mientras que los subordinados sólo tenían su posesión y usufructo. 


Los tributos se utilizaban para diversos fines, por ejemplo para el reparto de granos entre la población ante cualquier eventualidad climática (sequías, plagas, etc.), el pago de los funcionarios y el intercambio comercial con otras regiones. Se puede decir que era un sistema redistributivo ya que el excedente acumulado que era desviado en forma de tributo al estado volvía, cuando fuera necesario, a manos de los súbditos. 
Las grandes obras públicas, como la construcción de templos o monumentos funerarios, eran realizadas mediante el "sistema de corvea" (trabajo obligatorio). Cada año, todo individuo estaba obligado a efectuar tareas en beneficio del propio Estado. Esta mano de obra también se utilizaba para el mantenimiento del sistema de irrigación, el trabajo en las parcelas pertenecientes al Estado, en las expediciones comerciales y en el sistema militar -cuando era necesario. 
El comercio a larga distancia estaba destinado a la obtención de materias primas de las que carecía Egipto: de Siria se traían maderas para la construcción de pequeñas barcasas y resinas, de la costa del Mar Rojo llegaban incienso, ébano, marfil, pieles y piedras semipreciosas. 

Comercio Egipcio
En lo que respecta a la cultura, los egipcios tuvieron conocimientos de matemática, química, astronomía, medicina, etcétera. Conocían la importancia del corazón para el organismo humano. En matemática, la operación fundamental que trabajaron fue la suma, y de ella derivaron la multiplicación. Asimismo, utilizaron un sistema decimal de numeración: calcularon superficies, como la del rectángulo, el cuadrado y el círculo. 
La invención del calendario fue un hecho muy importante: el año tenía 365 días, dividido en 3 estaciones de 4 meses cada una (inundación, cosecha y siembra) y se completaba en 5 días de fiestas religiosas. 
En cuanto a la escritura egipcia, se pueden mencionar tres tipos: la jeroglífica, la hierática y la demótica. 

viernes, 29 de agosto de 2014

EL CÓDIGO DE HAMMURABI

La primera ley punitiva de la Historia 
Cómo dijimos anteriormente, el Código de Hammurabi aplicaba reglas para la vida en comunidad y en lo que respecta a las penas, estas se regían por el principio de la ley del Talión (que se resume en el principio del "ojo por ojo, diente por diente"). Cada victimario que había realizado una ofensa o acto maliciosos debía pagarlo sufriendo, de igual manera, el mismo daño. Las leyes aparecen representadas en escritura cuneiforme acadia en una estela de basalto, de casi 2,5 metros de altura. En la parte superior se puede observar al rey junto al dios Shamash o Marduk, quien parece entregarles las escrituras.
Si bien el código data del año 1692 a. c. (fecha que no coincide con el reinado de Hammurabi aunque se estima que fue el quien lo implementó), en algunas regiones del Cercano Oriente aún sigue rigiendo la vida en comunidad. El siguiente video hace mención al rito de la ordalía, una herencia del código que se mantiene todavía en vigencia.



La formulación del código permite detectar cómo estaba compuesta la sociedad, que era lo que se legislaba  durante esa época y bajo que condiciones se penaba a los victimarios en Mesopotamia.  
  1. El código no se redujo sólo a la aplicación de normativas para la sociedad con la finalidad de homogeneizarla bajo una misma legislación jurídica. De alguna manera, la codificación "por escrito" de leyes consuetudinarias -que regían desde ya hace siglos el destino de la población mesopotámica,- superaba la tradición oral de estas normas. 
  2. Es la primera vez que el Estado, en la figura de el rey Hammurabi, se colocaba como "administrador" de la justicia dentro de la sociedad. 
  3. La legislación permite observar una sociedad babilónica altamente jerarquizada, ya que se hablan de diferentes sectores sociales dentro de ella (hombres libres, mujeres, libertos y esclavos). Aún así, no podemos hablar de igualdad ante la ley, porque las penas a las que eran sometidos los infractores variaban según su condición social. 
  4. Finalmente, a través de esta legislación, Hammurabi imponía su dominio sobre los territorios conquistados a las otras ciudades mesopotámicas. Con la finalidad de infundir miedo y respeto, instaló en cada plaza pública las leyes punitivas, para que cada individuo supiera las penas que deberían afrontar ante cualquier infracción.
El código consta de 282 leyes o "artículos". Nombremos tan sólo algunas: 
  • Ley 129: Si una casada es sorprendida yaciendo con otro hombre, se los atará y se los arrojará al agua. Si el marido deja vivir a la esposa, el rey dejará vivir a su servidor.
  • Ley 147: Si la esclava no ha tenido hijos, la patrona la venderá por plata.
  • Ley 253: Si un hombre tomó a su servicio en locación a otro hombre para estar a su disposición y ocuparse de su campo, y le confió un arado, bueyes, lo comprometió a cultivar el campo. Si este hombre robó el grano y alimentos y si eso se encuentra en sus manos, se le cortarán las manos. 
  • Ley 282: Si el esclavo dice a su amo, "tu no eres mi amo", su amo lo hará condenar porque era esclavo suyo, y se le cortará la oreja. 
Leyes punitivas
Las leyes de Hammurabi significaron un adelanto en el tipo de coerción empleada en las civilizaciones antiguas. El poder punitivo recaía esta vez en manos del rey, ya que la codificación por escrito significaba un avance con respecto a la tradición oral. Hay que tener en cuenta que estas normas ya estaban rigiendo la vida comunitaria en Mesopotamia; la diferencia es que por generaciones se mantuvo en vigencia de forma oral, pues eran los sacerdotes quienes trasmitían y ejercían estos ritos o penalidades. Con Hammurabi esto cambia radicalmente.
Al respecto, el poder punitivo -según lo que establece el juez argentino Eugenio Zaffaroni en su libro "La cuestión criminal"- reemplaza a la víctima, la confisca. Es decir aparta al que realmente sufrió la lesión para arrogarse el derecho de decir que el "lesionado" es el Estado, en la figura del rey Hammurabi. 
Si una persona agrede a otra y le quiebra el hueso, el Estado juzga al agresor; lo "pena" alegando que lo hace para:
  • disuadir a otros de romper huesos u otros actos lesivos
  • para enseñarles a no hacerlo nuevamente
  • para poner de manifiesto quien "ejerce" el poder
Para explicar el código de Hammurabi, pensemos en un primer tipo de coerción, que pasó de ser una simple reparación -cuando se manifestaba oralmente- a ser punible con la llegada del rey, ya que este terminó institucionalizándolo. El hecho de arrogarse el derecho de juzgar y penar al infractor para reparar a la víctima implica la confiscación de su daño, pues quien aparece "dañado" es el mismo Estado.
La característica del poder punitivo es, entonces, la confiscación de la víctima: es un modelo que no resuelve el conflicto, porque una de las partes -el lesionado- está excluida de la decisión de que hacer con el victimario. El modelo punitivo no es un modelo de solución de conflictos sino de "decisión vertical de poder", porque sólo se ejerce en sociedades jerarquizadas, como la Mesopotámica o la romana si se quiere. Incluso, lo podemos observar en nuestra sociedad. 

Por ello, si pensamos en el Código Civil y Penal actual podemos retrotraer el tiempo y pensar cómo se legisló en sociedades primitivas. Allí encontraremos resabios de este código penal que terminan perviviendo en el presente. 

sábado, 23 de agosto de 2014

PRIMERAS CIVILIZACIONES: PODER DESPÓTICO Y SOCIEDADES HIDRÁULICAS

Despotismo Oriental y sociedades fluviales en la antigüedad

El descubrimiento del riego o agricultura de regadío hacia el año 5000 a. c. permitió un crecimiento de la producción y la creación de excedentes. Por ello las primeras civilizaciones, densamente pobladas, se instalaron cercanas a los ríos. La irrigación y distribución del agua exigía canales y obras hidráulicas que sólo una administración central como el Estado podía lograr, acopiando tributos y trabajo de la comunidad. 
Así por primera vez se produjo una diferenciación entre los que producían (campesinos y artesanos) y los que administraban el trabajo y la producción ajena (una casta privilegiada, sacerdotal o militar)
Para el historiador Karl Wittfogel, las sociedades hidráulicas eran aquellas civilizaciones que surgieron a partir de la agricultura del regadío de tipo hidráulico en entornos geográficos de aridez total, semiáridos y húmedos. ¿En que consisten? Según este autor, la necesidad de irrigar agua a los cultivos condujo al desarrollo del Estado, único capaz de organizar la construcción y mantenimiento de las obras hidráulicas. 
Este tipo de sociedades surgieron sobre todo en China, India, Mesopotamia y también en América (imperios incas, mayas y aztecas).
El Creciente Fértil: espacios geográficos aptos para la agricultura de regadío


Civilizaciones Fluviales: Mesopotamia y Egipto
Uno de los cuestionamientos más importantes sobre su hipótesis se ha fundamentado en que la práctica de la agricultura de regadío precedió al desarrollo del Estado como figura organizativa. Para John Steward, los conflictos por la tierra y los recursos en zonas densamente pobladas era lo que realmente explicaba la existencia de un poder centralizado en las zonas de agricultura fluvial. 
Este poder centralizado, conocido como "despotismo oriental" o despotismo tributario se encargaba de la construcción, organización y gestación de infraestructuras y trabajos agrícolas, especialmente ligados con la irrigación. Si bien revitalizó el potencial geográfico de los territorios donde había surgido, para mejorar el acceso a los cultivos a partir del riego hidráulico, gran parte de la población estaba sujeta a un sistema burocrático, casi servil, vinculado a una prestación laboral.
Gracias a esta dirección o guía altamente capacitada y competente y un aparato burocrático, se pudo movilizar la mano de obra para la realización de obras públicas de envergadura que aseguraran la supervivencia colectiva por un lado, y por el otro, la construcción de palacios, monumentos y tumbas que eran la exteriorización del poder de los déspotas.
Aún así existió cierto grado de autonomía dentro del cuerpo social a nivel familiar, comunal, gremial o religioso, ya que no representaba una amenaza política para el funcionamiento normal del despotismo agroburocrático.



El despotismo oriental se encontraba supeditado a tres condiciones:
  1. mantener en marcha la economía agraria (soporte esencial de todas las sociedades hidráulicas)
  2. no aumentar las prestaciones de trabajo y los impuestos hasta un punto tal que desanimara a los campesinos a seguir produciendo (los excedentes que tributaban al centro despótico)
  3. no permitir las luchas internas y externas que dividieran la vida de la población
La Mesopotamia: el país entre dos ríos 

La Mesopotamia se extiende entre los ríos Tigris y Éufrates. La historia de las ciudades instaladas en esta región se conoce a través de relatos biblicos y de las referencias proporcionadas por el historiador Heródoto. Recién en el siglo pasado se pudieron manejar fuentes históricas directas, ya que se pudo descifrar la escritura cuneiforme grabada en las tablillas de arcilla.
La región mesopotámica consta de dos regiones bien diferenciadas:
Por un lado, al sur del Tigris y Eúfrates, la Baja Mesopotamia, llanura cuyas tierras son fértiles gracias a las inundaciones que producen los ríos. En la antiguedad, esta zona fue habitada por varios pueblos. Los sumerios, cuando esta región tomo el nombre de Sumer, en la zona media se instalaron los acadios cuyo territorio se denominó Akkad. Posteriormente llegaron otros pueblos, como amorreos y caldeos.
Por otro lado, la Alta Mesopotamia, una zona montañosa con clima arido y poca vegetación, donde vivieron los Asirios.

Los Sumerios eran una civilización vinculada con la agricultura de irrigación. Construyeron una red de diques y canales para contener la inundación de ríos y canales para dirigir el agua hacia las zonas desérticas. Obtenían de su cultivo el trigo y la cebada, dátiles, etcétera.

                                      

La población estaba obligada a tributar a sus príncipes y lo hacían a través de los productos que obtenían de las cosechas o mediante la realización de servicios laborales. El Templo era el núcleo de las actividades económicas: era el centro de la administración de las tierras, el lugar de recepción de las caravanas comerciales y donde se reunían los artesanos. En él también se llevaban a cabo las ceremonias religiosas y la administración de justicia.
Posteriormente, los príncipes ligados a la guerra y la protección de los súbditos se desligaron de los templos y rigieron su propio palacio, que se transformó en centro de las funciones económicas y políticas.
Cómo la Mesopotamia carecía de materias primas básicas para la producción de determinados bienes como la madera, las piedras y los metales, desarrollaron el comercio -basado en el trueque- con algunas regiones: obtenían la madera de Fenicia, la piedra de Elam y los metales de Anatolia.
La sociedad mesopotámica estaba jerarquizada, ya que las distinciones se basaban en su poder, recursos económicas y actividades que realizaban dentro de la comunidad. Los grupos dirigentes englobaban al rey, los funcionarios -altamente capacitados en la escritura- al igual que los sacerdotes, y los jefes militares; los comerciantes y artesanos, que trabajaban para el palacio o el templo, y los campesinos que se dedicaban a la principal fuente de alimentos: la agricultura.


El Imperio Acadio y la Primera Dinastía Babilónica

En la zona media de Mesopotamia se habían instalado los pueblos semitas conocidos como acadios, en la ciudad de Agadé o Akkad. Si bien no habían entrado en conflicto con las ciudades sumerias, entró en conflicto con el rey de Uruk para posteriormente conquistar el resto de los poblados vecinos. La campaña de conquista la emprendió su rey Sargón que pronto centralizará el poder en su persona bajo el nombre de emperador gracias a la voluntad de los dioses (gobierno teocrático).

Bajo su reinado, las ciudades súmeras pudieron mantener cierto grado de autonomía, sobre todo en lo que respecta al mantenimiento de sus dioses y los asuntos internos. Hacia el 2050 se produjo un renacimiento súmero, donde cobró mayor importancia la ciudad de Ur que bajo una política imperial intentó restablecer el poder súmero en toda Mesopotamia.
Pero pronto sucumbieron ante una nueva ola de invasiones, en este caso de amorreos que se instalaron en Babilonia. Su gobernante más importante fue Hammurabi, que gobernó entre 1792 y 1750 a. c., cuya política fue la unificación de la región a través del uso obligatorio de la lengua acadia y la adoración del dios Marduk.
Sin embargo, su legado más importante fue la creación del primer código escrito de leyes punitivas de la historia, conocido como el Código de Hammurabi. Según el principio o Ley de Talión (ojo por ojo, diente por diente) cada victimario que había realizado una ofensa o acto malicioso debía pagarlo sufriendo el mismo daño provocado. Aún así, lo que deja en claro el código es por un lado, la existencia de una sociedad altamente jerarquizada, ya que se podían distinguir entre los infractores a hombres libres, esclavos y libertos con una gradación de penas diferentes entre sí. Por otro lado, la justicia comienza a ser administrada por el  mismo Estado.

viernes, 25 de julio de 2014

El NEOLÍTICO Y LA REVOLUCIÓN URBANA

El Neolítico o la Edad de la Piedra Nueva 

Tras un período de transición -el mesolítico- aparecieron las primeras culturas neolíticas. Algunos investigadores hablan de una verdadera revolución en la forma de vida. El hombre pasa de cazador y recolector a ser pastor y agricultor; es decir, comienza a vivir en una economía productiva: el mismo produce sus alimentos. 
Por eso, cuando se estudia la prehistoria, uno de los acontecimientos más significativos es el comienzo de la producción de alimentos, basada en las especies de vegetales y animales domésticas. Uno de los hechos más llamativos de la prehistoria mundial es que la transición desde la caza y la recolección a la producción de alimentos parece haberse producido de forma independiente en varias zonas y en todo caso, tras el término de la era Glaciar, es decir después del 10.000 antes del presente aproximadamente.
En el Próximo Oriente podemos rastrear los orígenes de la transición antes incluso de esa fecha, debido a que el proceso debió de ser gradual, una consecuencia (así como la causa) de la reestructuración de la organización social de las comunidades humanas. De todas formas, estaba en marcha en esa zona una agricultura estable, basada en el trigo y la cebada así como en las ovejas y las cabras ( y más tarde el ganado vacuno) en torno al 8000 antes de Cristo. La agricultura se había difundido a Europa en el 6500 antes de Cristo y está documentado en el sur de Asia en Beluchistán en torno a esas mismas fechas.
Parece haberse producido un desarrollo independiente, basado en el cultivo del mijo en China en el valle de Huang Ho en torno al 5000 antes de Cristo y casi al mismo tiempo surgió un foco aislado en el sureste de Asia con la explotación del arroz. La situación de África, al sur del Sahara, es más compleja debido a la diversidad medioambiental, pero el mijo y el sorgo ya se cultivaban en el tercer milenio.
En América se dispuso de una gama diferente de cultivos. En Perú el cultivo de judíos, calabacines, pimientos y algunas hierbas pudo haber comenzado antes del 8000 antes de Cristo y estaba en marcha en esa zona y en Mesoamérica en el séptimo milenio antes de Cristo. Otras especies en Sudamérica como la mandioca y la patata pronto se añadieron a esa lista pero la planta de mayor impacto en la agricultura americana fue el maíz, cultivado por primera vez en México en torno al 5000 antes de Cristo. 

Agricultura y Ganadería 
El hombre comienza a cultivar y para ello, al principio, los instrumentos son sencillos, como el arado, la azada y la hoz. También surgen los primitivos graneros, es decir, se comienza a prevenir ante la escasez: lo que no se consume en el momento, no se deshecha, sino que se almacena para cuando se necesite.  
Además se inició la domesticación de animales como perros, cabras, ovejas, vacas  y por último caballos. Su objetivo era en primera instancia el aprovechamiento de las carnes, leche o lanas. También se utilizaba los animales para la carga, para realizar tareas de labranza o transporte. La agricultura permitió al hombre el establecimiento en un lugar fijo, es decir, la vida sedentaria, pues se hacía imprescindible el cuidado de los cultivos y su posterior recolección.







Cerámica y tejido 
 La agricultura tuvo además otra consecuencia:  fomentó la aparición de la cerámica.  Es decir los “recipientes” para conservar los cereales. El tejido también se conecta con la agricultura y la ganadería, porque se utilizaban fibras de limo y luego lana.



Viviendas y monumentos
Con el sedentarismo y la domesticación, cambian las formas de las primeras viviendas. Se construyen sobre pilares, en medio de lagos, para aislarse de las fieras o del ataque de tribus enemigas.
Además, durante el Neolítico se llega al apogeo de la técnica de la piedra pulida. Los objetos más característicos son las puntas de flechas, los cuchillos y las hachas.
Antigua ciudad de Catal Huyuk en la región de Anatolia

La edad de los Metales

Es la etapa más breve de la Prehistoria o etapa ágrafa. De acuerdo a los hallazgos arqueológicos, fueron los pueblos del Cercano Oriente los que descubrieron la metalurgia. En Egipto y la Mesopotamia asiática se han encontrado objetos de cobre de una antigüedad de 5000 años.
Al principio el hombre empezó a trabajar los metales blandos. El cobre, por ser muy maleable, fue el primer metal utilizado por el hombre. El cobre presentó mayores ventajas que la piedra ya que una herramienta de cobre puede volverse a afilar y si se rompe puede fundirse de nuevo.
Más tarde el cobre fue fundido con el estaño y el hombre consiguió el bronce. Lo utilizó sobre todo para la fabricación de armas defensivas como cuchillos, espadas y puñales.
Por último al trabajar el hierro, los hombres pudieron desmontar selvas, combatir animales peligrosos, construir embarcaciones y edificar ciudades. 



A grandes rasgos, se puede decir que el Neolítico y el desarrollo de la tecnología del metal provocó una serie de condiciones que propiciaron la división social del trabajo y la acumulación de excedentes de producción. En este sentido, la domesticación de animales permitió la fabricación de tejidos, al igual que la producción agrícola y la cerámica, que vieron aumentada su excedente. Este mismo era destinado a la venta en poblaciones vecinas, dando origen al comercio y la navegación. Cada actividad productiva se especializó debido que individuos específicos se dedicaron a tiempo completo a su producción. De esta manera se dio origen a la división social del trabajo. 
Pronto estos cambios sociales y económicos desembocaran en la formación de los primeras ciudades- estados y el comienzo de las guerras. 


Caricatura que representa sarcásticamente las primeras rivalidades entre poblados

Economía agrícola y desarrollo de las primeras ciudades



En muchas ocasiones la economía agrícola experimentó un proceso de intensificación en el que los métodos más productivos fueron acompañados por un incremento de la población. En estos casos existía por lo general un contacto cada vez mayor entre las áreas diferentes, copartícipes de unos intercambios crecientes. A menudo, las unidades sociales se hicieron también menos igualitarias, manifestando diferencias de estatus y la posición personal, que los arqueólogos definen con la expresión de sociedades jerarquizadas. A veces resulta apropiado utilizar el término de jefatura. Sin embargo, estos términos se suelen limitar a las sociedades no urbanas. La Revolución Urbana, la siguiente transformación importante, no es sólo un cambio en el tipo de asentamiento: refleja profundas transformaciones sociales. La primera de ellas es el nacimiento de sociedades estatales, que presentan instituciones de gobierno mucho más diferenciadas que las jefaturas y a menudo conocen la escritura. Los primeros estados aparecen en el Próximo Oriente, en torno al 3500 antes de Cristo, en Egipto un poco más tarde y en el Valle del Indo en el 2500 a. c. En el Cercano Oriente, el nacimiento de Ur, Uruk y más tarde Babilonia, señaló el periodo de las primeras sociedades estado mesopotámicas y fue seguido en el primer milenio antes de Cristo de una época de grandes imperios, sobre todo de Asiria y Persia. En Egipto es posible seguir el continuo desarrollo de las tradiciones culturales y políticas durante más de 2000 años, desde la era de las pirámides del Imperio Antiguo hasta el poder imperial del Egipto del Imperio Nuevo. En el límite occidental del Próximo Oriente, surgieron otras civilizaciones: la Minoica y la Micénica en Grecia y el Egeo durante el segundo milenio a. c. y la etrusca y romana en el primer milenio a. c.