La primera ley punitiva de la Historia
Cómo dijimos anteriormente, el Código de Hammurabi aplicaba reglas para la vida en comunidad y en lo que respecta a las penas, estas se regían por el principio de la ley del Talión (que se resume en el principio del "ojo por ojo, diente por diente"). Cada victimario que había realizado una ofensa o acto maliciosos debía pagarlo sufriendo, de igual manera, el mismo daño. Las leyes aparecen representadas en escritura cuneiforme acadia en una estela de basalto, de casi 2,5 metros de altura. En la parte superior se puede observar al rey junto al dios Shamash o Marduk, quien parece entregarles las escrituras.
Si bien el código data del año 1692 a. c. (fecha que no coincide con el reinado de Hammurabi aunque se estima que fue el quien lo implementó), en algunas regiones del Cercano Oriente aún sigue rigiendo la vida en comunidad. El siguiente video hace mención al rito de la ordalía, una herencia del código que se mantiene todavía en vigencia.
La formulación del código permite detectar cómo estaba compuesta la sociedad, que era lo que se legislaba durante esa época y bajo que condiciones se penaba a los victimarios en Mesopotamia.
- El código no se redujo sólo a la aplicación de normativas para la sociedad con la finalidad de homogeneizarla bajo una misma legislación jurídica. De alguna manera, la codificación "por escrito" de leyes consuetudinarias -que regían desde ya hace siglos el destino de la población mesopotámica,- superaba la tradición oral de estas normas.
- Es la primera vez que el Estado, en la figura de el rey Hammurabi, se colocaba como "administrador" de la justicia dentro de la sociedad.
- La legislación permite observar una sociedad babilónica altamente jerarquizada, ya que se hablan de diferentes sectores sociales dentro de ella (hombres libres, mujeres, libertos y esclavos). Aún así, no podemos hablar de igualdad ante la ley, porque las penas a las que eran sometidos los infractores variaban según su condición social.
- Finalmente, a través de esta legislación, Hammurabi imponía su dominio sobre los territorios conquistados a las otras ciudades mesopotámicas. Con la finalidad de infundir miedo y respeto, instaló en cada plaza pública las leyes punitivas, para que cada individuo supiera las penas que deberían afrontar ante cualquier infracción.
El código consta de 282 leyes o "artículos". Nombremos tan sólo algunas:
- Ley 129: Si una casada es sorprendida yaciendo con otro hombre, se los atará y se los arrojará al agua. Si el marido deja vivir a la esposa, el rey dejará vivir a su servidor.
- Ley 147: Si la esclava no ha tenido hijos, la patrona la venderá por plata.
- Ley 253: Si un hombre tomó a su servicio en locación a otro hombre para estar a su disposición y ocuparse de su campo, y le confió un arado, bueyes, lo comprometió a cultivar el campo. Si este hombre robó el grano y alimentos y si eso se encuentra en sus manos, se le cortarán las manos.
- Ley 282: Si el esclavo dice a su amo, "tu no eres mi amo", su amo lo hará condenar porque era esclavo suyo, y se le cortará la oreja.
Leyes punitivas
Las leyes de Hammurabi significaron un adelanto en el tipo de coerción empleada en las civilizaciones antiguas. El poder punitivo recaía esta vez en manos del rey, ya que la codificación por escrito significaba un avance con respecto a la tradición oral. Hay que tener en cuenta que estas normas ya estaban rigiendo la vida comunitaria en Mesopotamia; la diferencia es que por generaciones se mantuvo en vigencia de forma oral, pues eran los sacerdotes quienes trasmitían y ejercían estos ritos o penalidades. Con Hammurabi esto cambia radicalmente.
Al respecto, el poder punitivo -según lo que establece el juez argentino Eugenio Zaffaroni en su libro "La cuestión criminal"- reemplaza a la víctima, la confisca. Es decir aparta al que realmente sufrió la lesión para arrogarse el derecho de decir que el "lesionado" es el Estado, en la figura del rey Hammurabi.
Si una persona agrede a otra y le quiebra el hueso, el Estado juzga al agresor; lo "pena" alegando que lo hace para:
- disuadir a otros de romper huesos u otros actos lesivos
- para enseñarles a no hacerlo nuevamente
- para poner de manifiesto quien "ejerce" el poder
Para explicar el código de Hammurabi, pensemos en un primer tipo de coerción, que pasó de ser una simple reparación -cuando se manifestaba oralmente- a ser punible con la llegada del rey, ya que este terminó institucionalizándolo. El hecho de arrogarse el derecho de juzgar y penar al infractor para reparar a la víctima implica la confiscación de su daño, pues quien aparece "dañado" es el mismo Estado.
La característica del poder punitivo es, entonces, la confiscación de la víctima: es un modelo que no resuelve el conflicto, porque una de las partes -el lesionado- está excluida de la decisión de que hacer con el victimario. El modelo punitivo no es un modelo de solución de conflictos sino de "decisión vertical de poder", porque sólo se ejerce en sociedades jerarquizadas, como la Mesopotámica o la romana si se quiere. Incluso, lo podemos observar en nuestra sociedad.
Por ello, si pensamos en el Código Civil y Penal actual podemos retrotraer el tiempo y pensar cómo se legisló en sociedades primitivas. Allí encontraremos resabios de este código penal que terminan perviviendo en el presente.
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